domingo, 13 de mayo de 2012

Cuidado, el pasado quiere golpearnos nuevamente.

"Billetes, por favor". La mirada del revisor recorrió el autobús hasta que algo la hizo detenerse. Dos hombres de piel oscura, procedentes de Bangladesh, trataban a toda prisa de marcar el billete para evitar la multa. No eran los únicos pasajeros que lo hacían, pero el revisor se plantó a grandes zancadas ante ellos.
Ocurrió el jueves, en una parada de autobús de la plaza Sintagma de Atenas, precisamente donde se encuentra la cámara de la democracia.
Los pasajeros, algunos de los cuales increparon al revisor, no tuvieron ninguna duda de que tenían delante a un seguidor de Chryssi Avghi (Amanecer Dorado). Le delató el grito marcial de "Egerthiti", en griego clásico, el mismo que usó uno de los fornidos cabezas rapadas que integran la formación, para ordenar a los periodistas que se levantaran en señal de respeto al "líder" la noche de la victoria electoral. 



El vídeo dio vueltas por todo el mundo y ha provocado una advertencia de la asociación de la prensa griega, diciendo que no aceptará "intimidaciones".
Esta es la nueva Grecia, donde un partido neonazi  -perdón: "nacionalista griego"-  obtuvo el pasado seis de mayo, medio millón de votos (el 7%) y consiguió 21 escaños en el Parlamento.
Dos años de crisis y el programa de austeridad más duro de toda Europa han pulverizado el paisaje político griego y han llevado al país en un viaje peligroso a los extremos. Los griegos se han vengado en las urnas de los dos partidos que han gobernado los últimos 37 años y que responsabilizan de sus penurias, pero al hacerlo han dejado el centro desierto y se han echado en brazos de una legión de formaciones que se amontonan a ambos extremos del espectro político. A la izquierda está el partido comunista KKE, una de las últimas formaciones estalinistas que sobrevive en Europa y que califica a la UE de "club imperialista". O la izquierda radical de Syriza, que amenaza con poner en jaque el euro después de convertirse en la segunda fuerza más votada.
Pero el verdadero salto a los confines de la democracia lo protagoniza Amanecer Dorado.
 


Niegan ser neonazis, aunque su símbolo recuerde a una esvástica, su dirigente, Nikolaos Michaloliakos (un exoficial del ejército griego de 55 años, que ha sido encarcelado en varias ocaciones por posesión de armas, explosivos, agredir a periodistas, y por participar en un atentado con bomba contra un cine en 1978haya expresado por escrito su admiración por Hitler, y a sus seguidores les chifle llevar el pelo rapado, levantar el brazo derecho y pegar palizas a izquierdistas y a inmigrantes.
"No somos nazis, no somos fascistas, no somos de extrema derecha. Somos nacionalistas griegos", dijo su portavoz, Michaloliakos, quien se mostró muy molesto con lo medios de comunicación que no mostraron su campaña electoral, y afirmó:
"Voy a avanzar, enfrentándome a la tiranía de los medios de comunicación, de las televisiones y de los periódicos. Quiero dedicar esta victoria a los valientes de camisa negra."
"Temednos, que ya llegamos."
"Amamos nuestro país y lucharemos hasta el final por este amor....No hay inmigrantes legales. Incluso los que tienen papeles llegaron de forma ilegal. Nadie les invitó, nadie les necesitaba. Violaron nues tras fronteras, nos invadieron por millares y, pasados algunos años, se hicieron nuevas leyes y esos inmigrantes ilegales se convirtieron en legales. Eso es lo que es ilegal."
"Invaden Grecia y les quitan los empleos a los griegos". "Si conseguimos el poder, deportaremos a todos inmediatamente y sellaremos de nuevo las fronteras con minas, vallas eléctricas y más guardias"
El discurso de Amanecer Dorado ha calado fuerte en un país cuya porosa frontera lo ha convertido en un punto de entrada para inmigrantes ilegales que sueñan con ir al norte de Europa pero acaban quedándose. Nueve de cada diez que entraron en la UE en el 2010 lo hicieron por Grecia, que tiene un millón de inmigrantes sobre once millones de habitantes.

Los inmigrantes son responsabilizados de la criminalidad, que se ha disparado hasta límites insoportables. En el corazón mismo de Atenas, algunas zonas se han convertido en guetos de yonquis y prostitutas, donde no hay tienda que no haya sufrido un robo, hoteles modernos y lujosos han cerrado y el precio de la vivienda se ha desplomado.
Es en estos lugares, abandonados por el Estado, donde los chicos de Amanecer Dorado triunfan.  En grupos de dos o tres, patrullan las calles con sus camisetas ceñidas, con el logo del partido.  Acompañan a las ancianas a los cajeros, montan guardia ante las tiendas, reparten comida y ropa entre los más necesitados.  Nunca piden dinero a cambio.  Amor por Grecia.

"Son como superhéroes, que hacen desaparecer el crimen de tu ciudad. Por eso atraen a tantos jóvenes", dice Stelios Vradelios, periodista del diario Ta Nea especializado en extrema derecha.
Esta es la cara amable de Amanecer Dorado que el partido promociona, su web está llena de dulces fotografías con jubilados.
Pero detrás hay otra realidad mucho más siniestra: las cacerías de inmigrantes.  
"Llegaron en moto, eran bastantes. Yo pude escapar pero a mi amigo le apuñalaron en la tripa", explica mirando al suelo Viteli, un nigeriano de 21 años.  
"Tiene permiso de residencia, pero no te lo preguntan antes de pegarte", dice irónico Christos Alefantis, presidente de una organización de sin techo que da cobijo al joven.

Amanecer Dorado, por supuesto, niega estar detrás de agresiones. Y la policía raramente encuentra pruebas. La sintonía entre ambos colectivos es un secreto a voces.
Según un cálculo del diario To Vima, uno de cada dos policías les votó. "Comparten el mismo odio profundo a la extrema izquierda", dice Vradelios, que ha publicado un par de fotografías en las que se ve a miembros de Amanecer Dorado luchando junto a la policía contra izquierdistas.

"Amanecer Dorado va a tardar en desaparecer. La inseguridad y el paro irán a más y los partidos extremos encontrarán más público", pronostica Stelios.

La xenofobia vende en la Grecia de la crisis.  Griegos Independientes, una escisión de Nueva Democracia, ha arrancado un 10% de voto con un discurso ultranacionalista. También Pasok y Nueva Democracia, ante la fuga de votos, han abonado el terreno.
El conservador Samaras dijo en campaña: "Vamos a reconquistar nuestras ciudades". Venizelos, del Pasok, que los inmigrantes ilegales y las enfermedades infecciosas que traen son el problema más grave que tiene Grecia.
Una de las últimas decisiones del Gobierno saliente ha sido abrir un centro de detención para ilegales, algo que Amanecer Dorado llevaba años reclamando.


 
Durante las últimas 24 horas para formar un gobierno de unidad y evitar repetir elecciones, el presidente griego, Carolos Papulias, ha convocado a los siete partidos parlamentarios para una poco prometedora ronda final de negociaciones. Papulias recibirá a las nueve de la mañana de forma conjunta a los líderes de Nueva Democracia (conservadores), Syriza (izquierda radical) y Pasok (social-demócratas) y luego a los del resto de fuerzas por separado, debido al rechazo de los partidos a sentarse con los neonazis de Amanecer Dorado.


Hoy 13 de mayo de 2012, varios grupos de simpatizantes del partido neonazi Amanecer Dorado, desde sus motocicletas, han lanzado panfletos homófobos en el barrio ateniense de Gazi, conocida zona frecuentada por la comunidad homosexual.
"Después de los inmigrantes, sois los siguientes", amenaza el texto de los volantes, que lleva impreso el logotipo de Amanecer Dorado, según recoge la prensa griega.


Por favor no cedamos ante el miedo, porque cuando nos paralizamos o ahogamos en él, todos corremos el riesgo de tomar por correctas ideas tan absurdas y abominables como las de estos nostálgicos de Hitler.
Esperamos que puedan empezar mañana una maravillosa semana y que aprovechen su tiempo para ser felices y ayudar a ser felices a otras personas.

Publicado por: Peter, Ondine, Charlot, Chabela y El_Rey.

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